Comienza a apreciarse en el mundo de los negocios, que el acceso a la información de consumo y necesidades en tiempo real de clientes y potenciales consumidores, ha debutado como ventaja competitiva entre las empresas de bienes y servicios.
Un claro ejemplo de ello es la llamada Internet de las Cosas, conocida por sus siglas IoT, (Internet of Things), famosa no sólo por ser una revolución tecnológica. El mercado del IoT, proyecta mover 7.3 trillones de dólares en tres años; números apoyados por la empresa de investigación de tecnologías Gartner, quien estima que al 2020, existirán de 26 a 30 billones de dispositivos conectados a este sistema.
¿Qué señales ve Weber Canova, vicepresidente de la empresa de tecnología Totvs, de este vaticinio?
Canova argumenta que el uso que ya se hace de los dispositivos móviles en la actualidad, es masivo. A eso se suma la aparición de los teléfonos inteligentes, y su gran cantidad de conexiones, que han hecho posible como nunca antes, estar comunicados a otras personas, lugares, empresas y objetos.
Hoy es común que cualquier persona posea dispositivos móviles y otras tecnologías para uso personal, mucho más potentes que las usadas en el ambiente corporativo, generando enormes desafíos para las organizaciones que necesitan diferenciarse frente sus colaboradores y al mercado.
¿Cuál es la tendencia?
Compañías de diversos sectores, están invirtiendo no sólo en aparatos móviles, sino en aplicaciones y soluciones capaces de transformar datos en información inteligente y rentable, que permita crear conexiones entre personas y objetos.
Por ejemplo, la automatización de hogares, el monitoreo de lugares, la dirección online de grupos de trabajo, etc., permitirán el surgimiento de nuevos modelos de negocios y servicios en línea, alimentados por información en tiempo real e identificación eficaz de usuarios al acceder a sistemas y dispositivos.